Ayer
Nueva Chicago sufrió una dura derrota en Mataderos, ante Ferrocarril Oeste, y
de esta manera no logró salir del fondo de la tabla de los promedios, que fecha
tras fecha acecha cada ves más a nuestro torito.
Primer
partido por el torneo en este año, y las ilusiones se renovaban. Enfrente se
encontraba Ferro, un equipo que viene en levantada y lo demostró en Mataderos.
Desde
el arranque Monllor debió lucirse tras que un delantero verdeolaga quede mano a
mano con el uno verdinegro, fue el primer aviso para los dirigidos por
Bernuncio, que minutos más tarde volvió a provocar un error defensivo y
Leonardo Fernandez no perdonó y abrió el marcador en la cálida tarde. El gol de
los de Caballito golpeó duro dentro y fuera de la cancha, y fue ahí dónde los jugadores
locales, ante la presión, reaccionaron y fueron en busca del partido. Petrovelli,
lo tuvo mano a mano, pero no logró concretar, aunque luego tendría revancha y a
los 37, de cabeza, coloca el empate parcial, y trajo un poco de alivio e ilusión.
Ilusión
que se acrecentó dos minutos después del empate, tras el penal que le cometió
el arquero Carranza a Ezequiel Petrovelli, y que Julio Serrano, en su partido
250, transformó en gol y en la victoria parcial para Chicago.
El
juego, no era el mejor, ni el que puede dar este plantel, pero la actitud había
cambiado, y con este 2 a
1 a favor se
terminó la primer etapa.
La gente siempre está |
Pero en
el complemento todo se derrumbó, ya que a los 3 minutos, llueve un centro en el
área verdinegra y nuevamente, por esa vía nos convierten un gol, era el dos a
dos y Desvaux el autor.
Las dudas
en el fondo, y la poca precisión en el mediocampo ocasionaban que la pelota
nunca le llegue redonda a los delanteros, Petro y Becerra, aunque el primer
nombrado, se las rebuscó y el travesaño le impidió marcar el segundo gol en su
cuenta personal y el tercero para el torito, el rebote le quedó a Mosca, pero
no logró dominar el balón y fue rápidamente acechado por los defensas
visitantes.
Parecía
ser que la picardía y el ingenio de Petrovelli, más algún pase fino de Serrano
sería la única salvación, ya que el DT local no arriesgó y los cambios que
realizó fueron de puesto por puesto (Caballero por Mosca a los 65 y Scifo por
Farias a los 70), pero claro aún quedaba un cambio más, que fue utilizado
cuando Chicago ya se encontraba en desventaja, tras una rápida contra de Ferro
que Capellino (delantero que había ingresado hacía seis minutos) cambió por gol
y por la victoria del verdiblanco.
En ese
momento ingresó Ábalos por Banegas, pero ya nada se pudo hacer, los minutos se
consumieron y la derrota concluyó, las lágrimas en el rostro de Damián Lemos al
retirarse de la cancha lo decían todo...
Final y desazón en Mataderos |
El
objetivo de permanecer en la categoría, obviamente, no está perdido, resta una
rueda en dónde ya no queda margen de error. Sin dudas hay muchas cosas que
corregir, y habrá que sentarse para replantear los errores cometidos fecha tras
fecha. El camino al Nacional costó cuatro años, y esta Temporada será la única
que verá descender dos equipos (a partir de la que viene serán cuatro), no hay
que desaprovechar la oportunidad… VAMOS CHICAGO!
RESUMEN DEL PARTIDO