UNA DERROTA POR EL DESCONTROL

Chicago se mantuvo en partido hasta el minuto 68, cuando fueron expulsados Mater y González, entonces Atlanta hizo pesar la superioridad y se impuso con goles de Mazzanti y Oyola.


El Torito se fue de Villa Crespo con las manos vacías. (Foto: Daiana Vitale)

El minuto 23 del segundo tiempo fue una locura. Primero Facundo Mater, el mejor jugador de campo de Chicago en este 2020, le pegó un codazo a Luis López y recibió la roja directa. Mientras Gastón Suárez le mostraba la tarjeta, Arnaldo González se peleaba con Axel Ochoa, que le había pegado una patada a Gonzalo Vivas. El 10 junto a Nicolás Previtali se fueron expulsados. Y luego llegó el descontrol, los gestos discriminatorios del "Pitu" y se terminó el partido para el conjunto verdinegro. 

En los 67' de juego, Chicago le hizo frente al líder de la Zona A. Desde el banco, Ezequiel Giaccaglia supo corregir a tiempo un defecto del sistema (Mater pasó a la izquierda y Cosi a la derecha) para frenar el envión bohemio en el inicio, en el cual Mazzanti marcó el camino por la derecha respaldado en la fuerza de Luis López y el despliegue de Ochoa Giménez. 

En los momentos más complejos del encuentro siempre apareció Alan Minaglia. El arquero verdinegro fue una muralla, tapó todo lo que le tiraron, cortó centros y transmitió mucha seguridad. Fue el punto más alto de los rendimientos individuales. Al uno verdinegro sólo pudieron doblegarlo cuando el "Torito" se quedó con nueve y escasas reservas anímicas y físicas. 

Mater se destacó a la expulsión por un codazo a López.
(Foto: Daiana Vitale)

Otra vez este equipo de Chicago demostró que tiene material para salir del fondo. Ayer en Villa Crespo tuvo un tramo en el que puso al rival contra las cuerdas. Fue en los últimos 20' del primer tiempo cuando supo cortar en el medio y salir rápido de contra. Sin embargo, no pudo trasladarlo al marcador. Y tuvo chances en los pies de Melo, Asenjo y una gran jugada del "Pitu" González. Todas con un denominador común: los reflejos de Rago. 

El "Bohemio" recuperó la intensidad ofensiva en el comienzo del segundo tiempo. Desplegó sus líneas ante un combativo Torito que esperaba una chance para generar riesgo de contra. Por esa razón, Giaccaglia decidió mandar a la cancha a Aldo Araujo en lugar de Cosi. Los minutos pasaban y Minaglia volaba para mantener el 0-0, hasta que a los 22' hubo un quiebre, un descontrol y una actitud vergonzosa. Se había terminado el partido para Chicago.

Diez contra nueve, con un sistema roto por las ausencias, sin contención (recién hubo cambios tras el gol de Mazzanti a la media hora del ST). Estos elementos causaron una derrota dolorosa porque el "Verde" estuvo a la altura, pero se quedó con las manos vacías y sin poder salir del último lugar. Desperdició otra chance de alcanzar a Mitre de Santiago del Estero.