DE MAL EN PEOR

Nueva Chicago tuvo una tarde espantosa y fue goleado 5-2 por Alvarado en Mataderos. Crónica de una derrota muy dolorosa, la segunda consecutiva.


¿Quién hubiese imaginado semejante pesadilla? Ni siquiera el hincha más pesimista habría vaticinado un 0-5 en 58 minutos de juego. Es que Chicago tuvo un partido de terror y Alvarado no lo perdonó: aprovechó cada uno de los horrores defensivos verdinegros y se llevó a Mar del Plata una victoria histórica ante un grande del Ascenso que sigue dando que hablar por hechos negativos. ¡Qué te han hecho Torito!

Un descontrol. Ese es el mejor resumen de los 60 minutos en Mataderos que dejaron un 5-0 en favor de Alvarado. Sí, increíble, impensado pero tan cierto como el mérito a la efectividad y pericia de Felipe Cadenazzi para convertir un doblete, a la verticalidad de Ezequiel Vidal, autor del 2-0 al filtrarse a espaldas de Bojanich y asistidor en el 3-0. Ambos delanteros superaron en velocidad a la última línea local, que tuvo una mala actuación y se vio afectada por un sistema defensivo que no funcionó.

El "Torito" de Mataderos deambuló y entró groggy al segundo tiempo. Nunca se encontró en la cancha. Y Alvarado tenía preparado los goles -léase golpes- precisos para noquear. Primero el lateral izquierdo Fernando Ponce gambeteó rivales hasta el área y consiguió el 4-0. Y luego Malagueño convirtió el quinto. Partido terminado a los 13' de la segunda etapa. 

Estimado lector no vaya a creer que el equipo de Mar del Plata es una máquina de fútbol. Todo lo contrario, mostró serias grietas defensivas, con fallas en el escalonamiento. Pero Chicago -entre varios defectos- se equivocó en la definición. Generó riesgo con los envíos de Melo desde la derecha y la presencia de Aranda, que tuvo tres situaciones de gol en los 45' iniciales: un cabezazo que se fue arriba del travesaño, un anticipo que salió desviado, y un mano a mano con Fernández que ganó el arquero visitante. Tampoco pudo Daniel González de frente al arco a los 15', cuando parecía hecho... Recién llegó al gol en el final gracias al "Loco", que siempre buscó y dio la cara. A tal punto que siguió en la búsqueda y tras un remate suyo, Fernández dio rebote y Castillón estampó el 2-5.

Una derrota dolorosa. No sólo por el presente y el futuro en el torneo, sino para los hinchas porque ven una imagen lejana a la deseada. Para este torneo, la dirigencia contrató a 12 futbolistas -a pesar de la anulación de los descensos y la supuesta apuesta a los jóvenes-, hizo una gran inversión y regresó Forestello para buscar ser protagonista. Por ahora, el resultado es el mismo: Chicago regala prestigio y está desorientado, en decadencia, y en el último puesto.

-Fotografía: Télam.