EL TORO SE AMOLDA

 Ayer por la tarde Nueva Chicago consiguió una importantísima victoria en Mataderos y ante un rival, clave en el promedio del descenso, cómo Independiente Rivadavia, un equipo con un presupuesto altísimo y que, hasta el momento, pensaba en los primeros puestos de la tabla, pero en la tarde del sábado se encontró con un verdinegro, que de a poco le está encontrando el rumbo a esta durísima e irregular Nacional B.

La parada en casa no era fácil, los mendocinos venían de capa caída tras caer ante Banfield, y buscaban rescatar un buen resultado en la casa de Chicago. Por el lado del local, los tres puntos eran vitales, para no perderle pisada a los rivales directos (NdR: Chicago quedó a un punto de Douglas) y poder tener una semana tranquila, finalmente fue el torito quien pudo conseguir el objetivo.
Y dicha meta la logró con supremacía, porque en los 90 minutos los dirigidos por Bernuncio fueron más y, afortunadamente, pudieron plasmarlo en el marcador, desde los 18 minutos cuando Mosca pica por la banda izquierda, tira un centro con un gran efecto, y Becerra de palomita, abre el partido y hace desaforar miles de gargantas que coparon el República. Ya con el resultado abierto, los mendocinos comenzaron a buscar alguna oportunidad para emparejar el pleito, pero sólo una vez tuvo la chance, de la mano de Piriz Alvez, pero Monllor le sacó las ganas de gritar al uruguayo, que minutos después dejaría con 10 a su equipo tras pegarle un codazo a Damián Lemos cuando fueron a disputar una pelota dividida.
Ya con uno menos, el equipo de la zona cuyana se desinfló, y el de Buenos Aires se agrandó, pudo ampliar en la primera etapa, pero un cabezazo de Mosca fue bien interceptado por Taborda.
En el complemento, las situaciones del verdinegro, se multiplicaron y hasta algún que otro, se le cruzó por la cabeza una sabia frase que dice “lo que se erra en un arco se convierte en el otro”, pero este sábado fue la excepción, porque pese a desperdiciar varias situaciones (como el mano a mano de Becerra, tiro libre de gomito, y un cabezazo del 9) un tiro de esquina se Julio Serrano se encuentra con la cabeza de Emiliano Lago, que impacta el balón, lo tapa el 1 visitante, pero da rebote, que es capturado por el mismo cabeceador y ahí a menos de dos metros del arco Lago no falló y trajo tranquilidad en el estadio, para que a partir de ese momento, todo sea una fiesta y cánticos, Chicago ganaba otra vez en su casa, cómodamente y ante un importante rival.
Tras el pitido final de Trucco, la gente rápidamente se metió en el próximo rival, Almirante Brown el viernes a las 21.30 (por el momento), en Casanova y sin TV… “Que este viernes cueste lo que cueste…”


RESUMEN DEL PARTIDO
Por Fernando Javier Martinez